viernes, 20 de junio de 2008

Oda al opositor

Han sido muchos días
de lucha sin cuartel
contra la espesa pereza
y el lúgubre desánimo;
es un enemigo cruel
el posible fracaso.

Sobre los muchos cadáveres
de todos los días muertos,
sin la gloria esperada
por tu enorme esfuerzo,
cual valeroso Aquiles
te veo solo e invencible.

Serán tus enemigos hoy
la incertidumbre y el desánimo:
véncelos con sereno aplomo.
Que ni los dioses conjurados
ni hombres ni demonios
hagan temblar tu mano.

Sea la pluma tu espada
y el conocimiento tu escudo,
que brille tu discurso
desconcertando al arbitrio.
Tú ya has hecho la gesta,
conquista hoy el Olimpo.


* Dedicado a mi amigo Rellán que ha domeñado a su voluntad y sigue fiel al camino que ha elegido.